El primer cumpleaños de un niño es un momento verdaderamente especial. Como fotógrafa, tuve la maravillosa oportunidad de capturar todos los mágicos detalles de la sesión de fotos Smash Cake que le hice a Keyla en mi estudio aquí en Valencia. Quiero compartir contigo cada uno de los momentos que hicieron de esta sesión una experiencia inolvidable para la familia de Keyla.


La sesión se llevó a cabo en mi estudio, un espacio donde puedo controlar todos los elementos para que tanto los pequeños como los padres se sientan cómodos y relajados. Elegí cuidadosamente cada detalle para crear un ambiente cálido y acogedor.


Decorado rosa para el primer cumpleaños


La familia de Keyla optó por un decorado en color rosa que encajaba perfectamente con la temática que estábamos creando. Además, eligieron de entre nuestro vestuario, un body rotulado con la palabra "one", un detalle encantador que enfatizaba el primer cumpleaños de Keyla.


La tarta de la sesión fue una Smash Cake de color rosa de la Central de Postres. Estas tartas son simplemente ideales para este tipo de sesiones, ya que permiten que los niños exploren y jueguen con la comida de una manera lúdica y encantadora. El color rosa le dio un toque femenino y adorable a toda la sesión.



Comienza la sesión Smash Cake


La sesión empezó a eso de las 10 de la mañana de un sábado. Cuando Keyla y sus padres llegaron, su sonrisa iluminó el estudio desde el primer momento. Juntos, los ayudamos a prepararse, cambiando de ropa y asegurándonos de que todo estuviera listo para capturar los mejores momentos de Keyla.


Una vez que Keyla estuvo lista, la llevé de la mano al set que había preparado especialmente para ella. El decorado, con globos y detalles en color rosa, era el escenario perfecto para iniciar la sesión. Fotografié a Keyla rodeada de globos y, por supuesto, no pudimos pasar por alto las fotos en familia, que son un tesoro de valor incalculable para los padres en el primer cumpleaños de su hija.



La Diversión del Smash Cake


Pero lo más emocionante estaba por venir: ¡el Smash Cake! Al principio, Keyla se sintió un poco sorprendida, pero no pasó mucho tiempo antes de que descubriera la diversión de aplastar la tarta y, por supuesto, ¡probarla! Con su carita llena de crema rosa, capturamos momentos tiernos y graciosos que quedarán para el recuerdo.


Para darle aún más vida a la sesión, pusimos canciones infantiles y pedimos a los familiares que hicieran reír a Keyla. Estas risas y sonrisas espontáneas son realmente el corazón de la sesión y se reflejarán en las fotografías como recuerdos llenos de alegría.


Las fotos con baño de espuma


Después de una divertida sesión de aplastar la tarta, y con la crema hasta en las cejas, llegó el momento de bañarse. Preparamos un baño calentito con espuma, y Keyla disfrutó chapoteando en el agua y jugando con la espuma. Es un momento perfecto de relajación para los peques, donde además de jugar, aprovechan para limpiarse los restos de tarta que aún les quedan por el cuerpo.